Síntomas y Signos de la Enfermedad Celiaca
Los síntomas y signos de la enfermedad celiaca pueden manifestarse a en cualquier momento de la vida desde que se introduce el gluten en nuestra alimentación.
Se desconoce la razón por la que la enfermedad celiaca comienza a manifestarse, pero a menudo sucede después de alguna infección, en el momento del parto, operación quirúrgica, situaciones de estrés... Todo apunta a que determinados factores ambientales junto con la predisposición genética y cierta ingesta de gluten hacen que en algunas personas se ponga en marcha la celiaquía de manera irreversible.
No todos los celiacos presentan los mismos síntomas o signos, de manera que una persona puede ser celiaca y no presentar las típicas diarreas. Incluso puede no presentar síntomas dependiendo de la forma clínica en la que se presente.
Los síntomas de la enfermedad celiaca son muy variados, tanto digestivo como no digestivos. En general, cuando aparece en los niños es más habitual la presencia de manifestaciones de tipo digestivo y cuando se presenta en adultos los signos y síntomas más habituales no son digestivos. Se dice que la celiaquía es una enfermedad camaleónica, puesto que se manifiesta con síntomas compatibles con otras muchas enfermedades lo que hace que sea difícil de diagnosticar.
SINTOMAS:
NIÑOS:
Diarrera.
Vómito.
Vientre hinchado.
Astenia, falta de energía, apatía, tristeza.
Irritabilidad.
Talla baja, fallo en el crecimiento.
Anemia ferropénica. Peso bajo.
Otros Hipotrofia muscular, trombocitosis, leucopenia, coagulopatias, efecto en el esmalte dental dislexia, hiperactividad, introversion.
ADOLESCENTES:
Con frecuencia no manifiestan síntomas
Diarrea malabortiva.
Estreñimiento, meteorismo.
Estatura corta.
Retraso de entrada en la pubertad y en la primera regla.
Otros Cefaleas, epilepsia dermatitis atópica, artritis crónica juvenil.
Diarrea crónica.
Estreñimiento
Dispesia.
Dolor abdominal.
Colon irritable.
Flatulencia.
Apatía, cansancio, astenia
Irritabilidad, depresión.
Pérdida de peso.
Anemia ferropénica., otras anemias (folatos, Vitamina B12)
Aftas bucales (yagas o úlceras en la boca) reiteradas.
Hipertransaminemia (transaminasas elevadas)
Infertilidad, abortos, menopausia precoz.
Dermatitis herpetiforme
Epilexia, ataxia, neuropatías periféricas, cefaleas.
Artritis, osteoporosis.
Edemas periféricos.
Miopatía periférica (debilidad muscular generalizada).
Si crees que puedes ser celiaco acude a tu médico. Si no te hace caso insiste, cambia de médico, reclama en atención al paciente o acude a un asociación de celiacos.
Lo más importante es un buen diagnóstico, tanto si eres celiaco como si sufres otra patología. Por favor, no comiences una Dieta Sin Gluten antes de ser diagnosticado porque al no ingerir gluten algunos marcadores darán falsos negativos y el diagnóstico será más complicado.
El protocolo de diagnóstico de la celiaquía está perfectamente establecido. Actualmente no se puede diagnosticar con un test de intolerancias alimentarias ni con una prueba genética por sí sola.
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